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miércoles, 16 de mayo de 2012

"LA BOTICA". ALLÍ NOS REUNÍAMOS LOS FINES DE SEMANA LOS DE RADIO VICTORIA Y MUCHOS MÁS.

Serván, Soto, LázaroTello y Carlos Alfonso Delgado
"La Botica". Pero no se trataba de un local de venta de remedios o productos farmacéuticos. En aquellos mis años de aprendizaje con los grandes locutores y animadores de Radio Victoria, se denominaba así a una tienda que vendía de todo en la esquina de 28 de Julio y Paseo de la República. Poseía un segundo salón para "eventos especiales" y allí caíamos indefectiblemente los locutores, operadores de audio y artistas que deseábamos despedir la semana. Aquella "botica" que atendía hasta que volviera a aparecer el Sol, cerraba sus puertas a las 11 de la noche, con todos adentro.

Mi maestro principal fue el inolvidable "animador de las multitudes" José Lázaro Tello. Terminada la audición del medio día allí empecé a probar y memorizar miles de anécdotas y experiencias con personajes que jamás me hubiera podido imaginar. Los famosos y los más célebres de la época se daban cita en la "botica". No solamente los de radio Victoria. Tenía un imán de atracción increíble. Nombraré al vuelo a David Odría que laboraba en "La Crónica", Gustavo Indacochea, el popular "manzanita" de radio América, Roberto Vargas, el pionero de la FM en "Radio Cien", "Calaverita cariñosa" Ricardo Flores y muchos más. Yo era un novicio y creyente de todo lo que aquella hermandad nos podía ofrecer.

Gente de Radio Victoria en "La Cabaña", año 1953.
Evoco estos recuerdos con Eduardo Navarro "El Reporter Esso" y me inspiró escribir sobre "la botica". Me preguntaba que si sabía algo acerca de los "borrachines" de nuestro entorno. Y tuvimos que aceptar que, él como yo, fuimos parte de tantas tardes, noches y amanecidas en aquella acogedora "botica" del chino Alejandro. También caían el "palomo" Manuel Traverso y los hermanos Carlos Alfonso y Hernán Delgado. Otros eran el "gato José Ugaz", el "sapo" Olivares, "Coché Carrillo, Marco Antonio Castro y otros más. Fue una costumbre ineludible la de reunirnos cada  fin de semana en la famosa "botica". No lo digo peyorativamente, pero imagínense: ¡Qué calidad de "borrachines"!

Lecciones en vivo y en directo de criollismo y buen hablar musical e intelectual. Reverente hubiera sido decir "bohemios", pero no. Prefiero el término aceptado y me siento inmerso en esa historia. Aprendí mucho, porque teníamos el cerebro, con nuestros 20 abriles cumplidos, apto a recibir códigos y contraseñas en lo que se han convertido los decires de ayer. Jamás se suscitaban pleitos ni tontas discusiones, por más que nos llenáramos de los efluvios aromáticos de un buen vino.

Otro grupo de asiduos concurrentes a la recordada "Botica".
Se llegaba a la "botica" hasta con "frac". Terminada la actuación en algún local nocturno, muchos artistas venían, con su vestimenta de gala en busca de los otros. Importante la inmensa cantidad de historias que se tejían entre tragos y cigarrillos. Todos de buen hablar, muy buenas voces y talentos que dejaban su sabiduría en el fondo de las copas. ¡Qué lujo de "borrachines"! Y fuimos uno de ellos. Me hice profesional a temprana edad y ya se enterarán de algunas otras historias de las que fuimos actores.

Una vez, la que hoy es mi esposa y cantaba música italiana, llegó a la radio en busca nuestra y no me halló. Salió José Eduardo Cavero, enterado de nuestro romance y, ante su indagación, le dijo: Vaya a la "botica de la esquina" que todos los sábados suele medicinarse allí con Tello y los Delgado. Le preguntó a Judith Acuña, dónde quedaba la botica. Se llevó tremenda sorpresa al conocerla y supo aquilatar la broma del famoso broadcaster y comprobar tiempo después que sólo fue una experiencia de juventud. Gratísimo recuerdo. Gracias.

martes, 8 de mayo de 2012

ANGEL MURILLO CÁRDENAS. UNA SEMBLANZA DEL CAMARÓGRAFO Y DIRECTOR DE CANAL 4. GRATOS RECUERDOS.

Angel Murillo
Mi estada en Canal 4 de Televisión empezó un 3 de Marzo de 1970. Lo ha manifestado antes y dije que mi contacto con esta empresa fue gracias al programa que animaba Kiko Ledgard y Antonio Llerena Marotti que me recomendó. Se fue a "México 70" y no volví a saber más del gran locutor colega. Pinasco conversó con Augusto Cácerez y ocupé una plaza vacante dejada por Arturo Pomar. En uno de esos programas con Kiko, conocí a Murillo como camarografo. Coordinador en el set era el "chato" Mejía que me trataba de "campeón". Director de Cámaras, Arturo Mc Kay. En las otras cámaras, Vera Tudela y Jaime Tam.

Con Angélica María
Me enteraría luego que Angel Murillo había estudiado su época escolar con mi hermano Eduardo la primaria. Estudió su secundaria en el emblemático Colegio Nacional "Ricardo Palma" de Surquillo. Rápidamente hicimos amistad y al poco tiempo jugábamos juntos en el equipo de fútbol de Control Maestro. Allí se nos incluyó porque no había equipo de locutores. Buscaré la foto para dar buena fe de esta querida remembranza. Por supuesto que participé ese primer año en América Televisión en casi todos los campeonatos de fulbito. Angel, fue muy querido en América. Sencillo y siempre sonriente y amante de gastar bromas. Un profesional de gran valor por su capacidad y dedicación.

Murillo el camarógrafo con So-
nia Oquendo y Luis A. Pinasco.
En esta etapa de mis blogs, tengo siempre una oportunidad de recordarlo gracias a su hija Lourdes Murillo Jayco que nos lee y se acuerda siempre de nosotros. Falleció hace dos años en España y dejó viuda y muchos nietos. Recordarlo es volver a esos sets y evocar a Salvatore Incandella, a Manuel Tam Calderón, a Javier Tulio Cano y a mis amigos de cabina Jaime Pizarro y Víctor Dongo Casalino. Los viernes, casi era una costumbre, el consabido sábado chico y sus "lijas". Murillo era cervecero y de poco acompañarnos. Lo gocé en esos inolvidables aniversarios del canal y en el que nos confundíamos con toda la gente.

Marticorena, Mamani, ANGEL
Cuevas y Lagunas. Abajo: Che-

lo Carnero, Álvarez, Vera Tu-
dela,Tito Romero y Rojas.
Dejamos Canal 4 en 1995 y aquella intromisión de Velasco y su revolución, partió nuestra historia. Muchos pasamos a TELECENTRO, en especial los sindicalistas y dirigentes. Nos falta reseñar esta etapa que, para nosotros, resultó en cierto modo halagüeña. Hicimos "Cincomanía" y debutamos como animador del mismo programa en varias ocasiones. Es otra historia. Recuerdo que Vicente Cuevas me contrató para amenizar el matrimonio de su hija en Barranco y allí estuvieron muchos colegas y entre ellos Murillo. Buen diente y muy afectuoso. Se quería y entendía con todos. Fuimos grandes amigos.

Tercero de Izq. a Der. Angel.
El último es Cánepa. No ubico
a los demás. El peinador Ro-
berto los obligó a usar las
pelucas o les quitaba las
camisetas.
Recuerdo aquella broma pesada que le hiciera Salvatore Incandella a Javier Tulio Cano. El "italiano" se había conseguido un lapicero mágico y al notar la presencia de Cano, en acuerdo con Murillo, le tiñó de tinta su camisa blanca. Murillo se enojó e hizo el cuento de liarse a golpes con Salvatore. Siempre sonriente y con Cano en todo el cuento, le pasó la mano por la camisa y la tinta desapareció. Fue entonces que Tulio Cano le pidió prestado el lapicero para hacerle la misma broma a "Mi Pagliacci", Ricardo Tosso padre, que lucía un saco blanco impecable. Salvatore le cambió el lapicero por otro normal y ya se imaginarán lo que pasó.

Una de sus última fotos con su
esposa Lidia en Navidad.
Recordar a Angel Murillo, es haber vuelto nuevamente a parte de nuestra vida con 25 años dedicados a promocionar los programas de América Televisión. Salvatore terminó su vida suicidándose, Mc Kay nos dejó debido a su enfermed de "gota" y son muchos los que han partido al más allá. Un abrazo a los que todavía permanecemos en esta tierra y seguiremos con estas remembranzas, importantes porque nos llevan a tiempos que consideramos inolvidables. Un saludo a la nueva generación de Canal 4 de Lima y en donde todavía se muestra Luis Angel Pinasco. Inviten a los viejos que todavía quedamos y que tuvimos el grato placer de trabajar en esas instalaciones de Santa Beatriz, Gracias.