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sábado, 31 de diciembre de 2011

UNA EVOCACIÓN AL AYER Y QUE LA DEDICO A MI AMIGO Y GRAN COLEGA EDUARDO NAVARRO CARRIÓN. ¡FELIZ 2012!

"El Reporter Esso"
Siempre charlamos por teléfono y nos nutrimos de recuerdos. Hace ya buen tiempo que lo reseñé en mi blog "Locutores en el Perú" y lo daba por desaparecido. ¡Cosa más grande, chico! Nos llamó y pidió aclaráramos el asunto. Estaba como se pide chumbeque y desde allí nos proporcionó fotografías de sus mejores momentos, aquellos del famoso "Reporter Esso" de Radio América. Una voz grandiosa para que las noticias sobresalgan y el público oyente pudiera gozarlas en toda su magnitud.

Nos ha conversado sobre César Chávarri Neyra y lo incluye en fotografía nada menos que al lado de Manuel Traverso, Billy Billiers, César Augusto Huertas y otros. Él posa muy elegante y sobrio. Recuerdo gráfico de una de las tantas reuniones de amigos después de la faena cumplida. Otra novedad para nosotros fue ver a un quinteto de locutores como Gustavo Indacochea, Juán Ramírez Lazo, él y Raúl Calle más Pepe Delgado. Ya están en nuestro blog dedicado a las grandes voces del Perú.

Aquí están César Augusto Huertas, Billy
Billiers, Eduardo, Traverso y Chávarri.
¿Qué hemos ganado con descubrir a Eduardo Navarro? Estaba en la misma situación de olvidados hombres del micrófono y que hoy, gracias a nuestras evocaciones, resurgen y dan qué hablar. He ganado en más historia y verídica porque salen de labios de Eduardo Navarro. Es un experto enviador de correos, todos fantásticos y espectaculares. Es un gozo distraerse con muchas fotos y reenviarlas a otros para que tengan la satisfacción de disfrutar de ellas. Todos nos felicitan gracias a Eduardo.

No olvido su generosidad cuando nos invitó a pasar un buen rato en su hogar. Hasta ahora hay un sabor  a chifa en nuestros recuerdos. Todo el arte mandarín se manifiesta cuando cruzamos alguna avenida y divisamos el letrero de algún establecimiento chino. Allí está el secreto de saber recordar. Bastan unos detalles y automáticamente volvemos con la imaginación al lugar del "pecado". Lo que hicimos aquella vez atentó contra el precepto de la "templanza". ¡Es que todo estuvo tan rico!

Aquí posan Marco Antonio Castro, Fidel
Ramírez Lazo y Alberto Arenal Coronel.
El interés de evocar estos recuerdos no tiene más que un objetivo: escribir sobre Eduardo y retroceder a tiempos felices. Cada foto de los 40 o los 50, tiene marcadas las huellas del tiempo. En cada arruga de nuestros rostros hay una señal de amigas y amigos. Las canas demuestran que tuvimos una juventud blanca y sana. Sin prejuicios y siempre valorando al que vale. Igualmente tratamos sobre Marco Antonio Castro, el que perdió su puesto por pegarle un "cocacho" al hijo del dueño. Fidel Ramírez Lazo, una de las grandes voces y Alberto Arenas Coronel, gran maestro al que tengo siempre presente.

Va con todo mi aprecio esta nota para ti Eduardo. Atrás quedaron esas celebraciones inolvidables para esperar el Año Nuevo con amigos tan especiales como Raúl Calle, Víctor Dongo, Nelson Arrunátegui o Carlos Alfonso Delgado. ¡Qué festejante era Manuel Traverso! Un arequipeño diferente y siempre recordado como "el palomo". Muy elegante y divertido. Tuvimos esos privilegios de alternar frente al micrófono y frente a las "chelas" con estos grandes de nuestra locución. Un abrazo Eduardo y ¡Feliz 2012! Gracias.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

MIS RECUERDOS DE LA NOCHE BUENA. ¡LOS PEDIDOS AL NIÑO JESÚS! UNA ANÉCDOTA.

"EL NIÑITO
JESÚS"
Hace 53 años, todo el tiempo de nuestro feliz matrimonio, un "niñito" ocupa la cuna de aquel pesebre en el que naciera Jesús. Cada mes de Diciembre, sentimos la necesidad de reencontrarnos con Jesús. Volver a aquella alegría que nos une cada vez más. Es por eso que este año, mi querida esposa Antonieta, vuelve a levantar su Nacimiento con la ayuda de Juanita, mi hija, y cada vez ocupando más paredes de la sala hogareña. Cada mañana hacemos el rezo, aquel del ritual alrededor de la corona de espinas.

Pero vayamos a la remembranza. Siempre se nos acostumbró a esperar al Niño Jesús. Después sería el Papá Noel y a esperarlo con la mirada puesta en la ventana de nuestro dormitorio. ¡Siempre nos quedábamos dormidos. Hablamos del niño Carlitos de tan sólo 5 años. Muy iluso y creyente. No acostumbrado a lo que hoy predomina: el obsequio fastuoso y exagerado de juguetes. Nuestro "Papá Noel Ángel", mi padre, debía mantener con su sueldo de policía honesto, a una familia llena de hijos. Fuimos siete hermanos.

¡Cómo olvidar aquel primer juguete! Un monito que saltaba estirado por una goma. Tan modesto, hoy lo digo, pero en aquel momento: ¡un lindo juguete! Siempre crédulo y esperanzado, y ya concurrente a ver las "seriales" como "El Llanero Solitario", siempre deseaba tener lo necesario para disfrazarme de él. Así, en otra navidad, le escribí a Papá Noel para que me complaciera. Con toda la ilusión gigante de un niño confiado y sano, puse mi carta en los zapatos a la ventana y me quedé dormido. No puedo olvidarlo.

Aquel despertar fue una desilución. Quien me había seguido el juego fue mi hermano mayor al que que cariñosamente le decimos "Chocatito", de Sócrates. Era también un niño. ¿Saben lo que hizo Chocatito? Me hizo la máscara del "Llanero" con una tapa negra de algún cuaderno. Las pistolas, las confeccionó con dos hojas de "El Comercio", muy enrolladas y dobladas por el medio, es decir, las clásicas pistolas que nos ingeniábamos los niños de esos tiempos. Y le creí cuando me explicó que Papá Noel estaba pobre.

¡Qué cándido era! Como todos los niños de aquellos dorados tiempos. Mentes sanas y limpias. Creyentes al máximo y que se conformaban con lo que recibíamos en nuestro hogar. Fue una decepción en esos mis primeros años y, a modo de bromearnos un poco, siempre se lo recuerdo a Sócrates. Pero, no nos afectó en lo profundo de nuestro ser. Nos agrada ver felices a otros y hoy, sin estar muy de acuerdo, criticar aquella ostentación que muchos padres modernos demuestran a sus hijos, llenándolos de juguetes.

Creo que la culpa es de los chinos que los han abaratado y hasta en los más humildes hogares de cualquier cono, los niños disfrutan de un verdadero juguete. Una remembranza sin enojos. Recuerdos de nuestra humildad y que toma fuerza cuando sentimos el verdadero sentido de la Navidad. Jesús nació en un pesebre muy humilde y de allí se convirtió en hombre para morir por nosotros. ¡Vaya qué relato! Les deseo que este 25 en su Noche Buena, se hagan realidad vuestros deseos. ¡No pidan mucho! Gracias.

jueves, 20 de octubre de 2011

REENCUENTRO CON EDUARDO NAVARRO CARRIÓN. 19 DE OCTUBRE 2011. LAS HORAS VOLARON.

 Reposa su mano sobre
mi hombro en señal
de gran amistad.
Lo he dicho y repetiré siempre que lo bueno de escribir estos blogs está en los resultados. Por ejemplo, en "Locutores en el Perú", reseñamos a quienes hicieron historia en la radio de ayer y los que triunfaron en los inicios de la televisión. De pronto, de manera sorpresiva llegan los comentarios y muchas veces de los propios reseñados que, a nuestro modo de ver, estaban perdidos para los que supimos de sus triunfos. Es aquí donde toma relevancia lo que manifiesto en este primer párrafo. Calculo que han transcurrido casi 30 años que no veía en persona a Eduardo Navarro, el recordado "Reporter Esso" de la radiotelefonía peruana.  

Resulta que en una de  nuestras reseñas dimos por muerto a Eduardo. Alguien, sin ninguna mala intención, lo dijo en un programa radial que hacíamos por 1990. Al iniciar los blogs, lo dimos por hecho. Un buen día, el propio Navarro nos llama y nos reclama con toda razón. Con buen sentido del humor, rectificamos la nota. Quedó todo como una anécdota y le dedicamos otra reseña con mayor exactitud de datos. Renace una vieja amistad laboral y nos beneficiamos con la voluntad de este gran locutor para favorecernos con sus fotos, una verdadera historia gráfica por los personajes allí mostrados. 

En su sala y mostrando
adornos de gran valor
nostálgico.
Todo a través del teléfono y como si una tromba de recuerdos nos invadiera a ambos. Con este paso, ya nos damos por bien pagados. Yo veo el triunfo por escribir, a través de hallar a los colegas y volverlos a mostrar en cada reseña. Hace menos de dos semanas surgió la idea de volvernos a ver en persona. Lo acordamos y quedamos que sería el miércoles 19 de Octubre. Vino la espera y los datos para ubicarnos. Navarro reside por el Jockey Club de Monterrico. Nosotros estamos en la urbanización Santa Isabel de Carabayllo. Viaje largo con una previa confrontación de datos. De por medio existía un acuerdo para almorzar juntos. 

Mi amigo tenía una serie de lugares, de lo más variados, en el "Jockey Plaza". Llegamos puntuales y desde lo alto de un puente sobre la Vía de Evitamiento, divisé a Eduardo Navarro y ambos levantamos los brazos en demostración de alegría. Cruzamos, bajamos y ¡Oh feliz encuentro! Un abrazo cordial, una invitación a subir a su automóvil, un reconocimiento a las rutas de acceso a su hogar y de frente a buscar "el merecumbé". Una playa de estacionamiento, escalera mecánica y estos "chibolos" como en sus mejores tiempos nos dirigimos a la primera sugerencia del oferente: ¡Chifa! La verdad y sin exageraciones, todo un éxito. 

Fue una tarde maravi-
llosa el reencuentro de
dos locutores amigos.
Agradezco a Eduardo y lo felicito por sus excelente estado  de ánimo y físico para enfrentarse a un menú que fue toda una delicia. Como en los viejos tiempos. Hubo hasta postre. Evocaciones y comprobar la magnífica situación que acompaña al "Reporter Esso". Producto de sus habilidades en la Publicidad y en el mundo de las inmobiliarias. Me alegro de ello. Pago por "los daños causados" y a conocer su residencia. Buen dominio de su automóvil  y ya en casa y dentro de ella, su acogedora bienvenida.

Un "teclado" nos obligó a interpretar algunos temas de su preferencia, ante su beneplácito. Un recorrido por sus dominios y su gentileza de hacernos sentir bien. Un obsequio delicado y que nos recordará por siempre a Eduardo y a charlar brevemente en su sala. Lindos cuadros evocativos de su familia y su cara nostalgia por su querida esposa que partió al lado de Dios hace 8 años. Nos habló de su hija y nieta y, finalmente, fue Marleni, su fiel ama de llaves la que colaboró dejando en fotos este inolvidable reencuentro. Un mágico día y un retorno al hogar, como volviendo de un grato sueño. Te debo mucho querido Eduardo Navarro Carrión. Gracias.

sábado, 15 de octubre de 2011

EVOCANDO A CHARLIE THOMSON ALCÁNTARA, EJECUTIVO DE VENTAS DE AMÉRICA TELEVISIÓN. PRIMERA Y DORADA ÉPOCA.

A la memoria del inolvidable
Charlie Thomson
Visitando Facebook me encontré con una grata sorpresa y un pedido que no me lo pude haber imaginado. Me escribía Charlie Thomson hijo y me pedía le hablara de su papá. Fue una leyenda de América Televisión Canal 4 y un Ejecutivo de Ventas maravilloso. Nació para establecer relaciones de vinculación entre las casas principales del comercio, empresas de negocios y firmas notables que requerían del servicio publicitario de América. Brazo derecho de Don Antonio Umbert  y perteneciente a esa era dorada del Canal 4 de Lima.

Me limitaré a recordar a Charlie como amigo. Excelente. De una extraordinaria cordialidad y muy sociable. Un hombre nacido para vender. Servicial y mano generosa. Su hermano Juán, a quien conocí en RRPP del canal, con las mismas cualidades de Charlie, ayudaba en lo que su cargo con Pepe Delgado y Javier Tulio Cano podían ser útiles. Las épocas de campañas publicitarias, como los Mundiales de Fútbol, lo ponía en acción y gracias al equipo que dirigía se aseguraba el éxito de las mismas. ¡Había que ver cómo funcionaba!

Existía en la Av. Larco de Miraflores un restaurante "Caminito" y me contrató para ponerle voz y texto al aviso que iba a servirle de promoción. Estuvimos en su oficina y me proporcionó todo lo necesario para hacer el cometido. Funcionamos a su ritmo y una vez producido el "jingle" saltó de alegría y terminamos cenando en la Costa Verde y, por supuesto, adornada la mesa con dos vasos "wisqueros" a la roca. Todo el mundo saludaba a Charlie y caminar por esos lares era como estar en su lugar de recreo y amistad.

Charlie brinda entre Alfonso
del Carpio y Víctor Dongo.
Muy popular y querido en el Canal, era el padrino favorito de los que organizaban campeonatos de fulbito. Se celebraba un aniversario de América y era el encargado de conseguir todo lo necesario para el agasajo. Una vez me contrató con mi agrupación musical para amenizar una reunión en la casa de campo del famoso Carlos Enrique Melgar, abogado y político. Lo pasamos muy bien y siempre Charlie era el motor para que la fiesta saliera a pedir de boca. Cumplía con los pagos sin objeciones y feliz.

En otra oportunidad y deseando servir a una pareja de novios, les obsequió la orquesta y además la terraza de su casa, la que adornó como era debido y en la que no faltó nada para el agasajo a los concurrentes. Esa noche concluyó con un pequeño grupo y en la que se contaba con la viuda de Ciro Alegría y Cecilia su hija. Otras personas ligadas a ellos completaban el cuadro. Música de fondo que se extendió por varias horas más, hasta que las luces del nuevo día nos sorprendían a todos. Había Charlie Thomson Alcántara para rato.

Conservo hasta ahora un buzo deportivo que me obsequió, al margen del pago correspondiente. Muy alegre y divertido y siempre dispuesto a completar los viernes con mesas bien despachadas y el correspondiente rocío de elixires espirituosos. En otras palabras: "Trago y del bueno". La foto que acompaña esta reseña lo muestra muy amigo y no estoy en ella porque fui quién disparó el flash. Están mis colegas Alfonso Del Carpio y Víctor Dongo Casalino, este último guitarra en mano para cantar "Muñeca Rota". Espero haber complacido a Charlie Thomson Jr. Gracias.

miércoles, 12 de octubre de 2011

LAS FOTOS DE EDUARDO NAVARRO Y NUESTROS RECUERDOS. UN VOLVER AL PASADO CON "EL REPORTER ESSO".

Brindan Raúl Calle y Navarro
Nuestras remembranzas están inspiradas hoy en esta fotos enviadas por Eduardo Navarro "El Reporter Esso". Tienen tal trascendencia como esta primera en la que aparece brindando con Raúl Calle, un extaordinario locutor y además compositor del vals "Yo te perdono" que tuvo una magistral versión en la voz del cantor Juán Carlos Miranda, vocalista de la Orquesta de Jorge Huirse allá por 1942. Raúl le compuso también una polca criolla al legendario Daniel Carpio, gran nadador peruano que cruzó El Canal de la Mancha y otros temas de gran popularidad en su tiempo. Gran publicista y "Reporter Esso" como Eduardo Navarro.

Personajes del espectáculo y la locución.
En esta otra, una clásica reunión de gente siempre ligada a la locución y en la que aparecen César Augusto Huertas, comentarista de cine y muy famoso por los años de 1950. Pasamos al 3ro. que es Willy Billiers, un cantor de música internacional muy versátil y popular. El propio Eduardo Navarro Carrión. Continúa Manuel Traverso Málaga "El Palomo", popular locutor arequipeño y César Chávarri Neyra, inolvidable conductor del concurso "Quien Estudia Triunfa" y profesor de mi Alma Mater, el emblemático Colegio Nacional Ricardo Palma de Surquillo. Toda una figura de la radio que sobresalió de manera extraordinaria en todo el Perú.

Primeros años de América Televisión Canal 4.
Aquí tenemos un testimonio gráfico de los inicios del Canal 4 de América y en plena celebración. Parados: Alfredo Espinoza y Antonio Tineo, grandes periodistas en sus inicios. Sigue Don Antonio Umbert Féllez el artífice y Rosita Bentín su esposa. (Entre ambos asoma Eduardo Navarro). Continúa Roberto Cruzado, el Gerente Contador y Nicanor Gonzales Vásquez, el otro artífice del Canal. A su costado uno bajito, Humberto Velásquez, gran locutor de Radio América. Entre los arrodillados identificamos al camarógrafo Juán Kagami que aparece sonriente y el de bigotes que no recordamos su nombre. Fueron los primeros.

Oswaldo Vásquez distin-
guiendo al "Reporter Esso"
Esta foto corresponde a un acto especial de reconocimiento a Eduardo Navarro como "El Reporter Esso" y es Oswaldo Vásquez Buitrago el encargado de distinguirlo con una medalla por su labor. Oswaldo, fue un querido locutor argentino que se quedó para siempre en el Perú y se casó con Mabel Duclós, excelente dama de la pantalla chica como "la esposa del Jefecito" en "Risas y Salsa". Eduardo lee complacido el Diploma que le entregó "Esso Extra Movil Oil" en el auditorio de Radio América. Década de 1950. Guarda entrañable afecto al notable y ya fallecido colega Oswaldo Vásquez Buitrago, por su limpia trayectoria en nuestros medios de radio y televisión.

Varios famosos "Reporter Esso" en un brindis.
Otra foto de antología y en la que aparecen varios "Reporter Esso" celebrando un Aniversario. El primero de la izquierda Gustavo Indacochea, el popular "Manzanita. Sigue Juán Ramírez Lazo, ampliamente conocido y recordado después en Radio Periódico "El Mundo" por Radio Victoria. Al centro el último "Reporter Esso" Eduardo Navarro, el más famoso. Continúa Raúl Calle, gran voz y compositor. Completa la escena José Delgado Goyzueta "Zorro Plateado" y brillante animador de Radio América. Una ofrenda floral que celebran todos los que con sus voces dieron prestigio a uno de los mejores noticieros de la radio en el Perú.

Programa taurino de Luciano
Ruiz de Navarro "Ráfagas".
Esta última fotografía destaca al centro a un personaje muy célebre en su tiempo. Dedicado al mundo taurino y que comentaba las temporadas en Acho con imponente voz y un modo de saludo inolvidable. Se trata de Don Luciano Ruiz de Navarro, el célebre ¡Raaafaagas! Esa R era exagerádamente pronunciada. Invitado de honor fue el de la derecha, "Jaime Ostos", figura de primera categoría en Acho. Ambos españoles. Locutor del programa nuestro querido Eduardo Navarro, que tuvo la   gentileza de donarnos estas fotografías. Hay muchas más que estamos agregando a las reseñas de otros queridos locutores que hicieron historia en la radiodifusión peruana. Gracias.

lunes, 3 de octubre de 2011

LOS RADIO OPERADORES. EVOCANDO A SAMUEL SOTO MARIUS EN "VICTORIA" Y A JORGE "COCO" SALAS EN "RADIO LUZ".

En esta foto estamos Serván, Samuel Soto M.,
José Lázaro Tello y Carlos Alfonso Delgado.
En toda emisora y responsable de que nuestras voces se oigan bien, son los operadores de audio. En Radio Victoria recuerdo a Samuel Soto Marious, que ingresaba a las 7 de la mañana para darnos pase a Alberto Arenas y yo en el Radioperiódico "El Mundo". Después continuaría con los radioteatros y finalizaba en el auditorio con "Los Embajadores Criollos" y otros. Nos hicimos amigos y fuimos cómplices en varias bromas que gastamos a nuestros colegas. Se sabía todos los números telefónicos de la radio. Por ejemplo, gracias a él, llamamos a José Lázaro Tello desde el fono de Redacción al Control y anexo de Locución.

Le hizo una seña a José Lázaro y este acudió a recibir la llamada. Desde nuestro "lugar de bromas", imitando la voz del Sr. Cavero, lo invitamos a acercarse a su oficina. Esta parejita advirtió como el negro Tello, casi como eyectado por un resorte, se levantó, salió de la cabina y se dirigió a la oficina de Cavero. Nosotros, Samuel y yo, observábamos todo. Toca la puerta de la Gerencia, saluda y se pone a sus órdenes. La reacción del dueño de la radio fue instantánea. ¡Maldita sea, oiga! ¡Nadie lo ha llamado! ¡Vaya a su hueco! Es que Sr. Cavero, yo recibí su llamada, dijo Tello. ¡Vaya hombre, que tiene que dar la hora! Y se retiraba,

La verdad es que Samuel, tan muchacho como yo y conocedor de las reacciones de muchos colegas y en especial del Sr. Cavero, se las ingeniaba para comprometernos. Nunca advertí sospecha alguna en Tello sobre mi. El resultado de aquella broma, no fue tan simpático. Lo lamenté porque José Lázaro, todo un señor, fue mi maestro en lo que significaba introducirnos en el criollismo, aquel que se vivía en vivo y en directo y con jarana y todo. Hoy evoco a Samuel Soto, porque fue el primer operador que conocí. Fuimos muy amigos, renunció a la radio y continuaríamos siéndolo mucho tiempo después, ya fuera de ella.

Jorge "Coco" Salas
"El Mago de las
Perillas"
Otro Radio operador que evoco con afecto es Jorge Salas a quien conocí en la desaparecida Radio Luz del Padre Gonzalo Alcocer y yo bauticé como "el Mago de las Perillas". Eran los años 60 del siglo pasado. Realizábamos una programación especial con música italiana, española e internacional. El ambiente de una cabina de locución y el control, se limita a los dos. Hay una soledad difícil de superar. Sin embargo "Coco Salas", se las ingeniaba para alimentarnos de optimismo y sonreía ante nuestras ocurrencias frente al micrófono. Verlo así, era un estímulo a nuestro trabajo. Nos hicimos grandes amigos.

Todo locutor, como siempre lo comento con Eduardo Navarro a través del teléfono, ha tenido que pisar por diferentes tiendas. Había que buscárselas. Así llegué a Radio Luz y evoco anécdotas con Jorge Salas. Era tanta la confianza entre nosotros y las bromas que nos hacíamos, que aún recuerdo aquella vez y refiriéndose al "Banco de Dios", programa de ayuda a los necesitados que dirigía Gonzalo Alcocer, me preguntó si  nosotros éramos pobres o ricos. Le respondí siempre en broma que lo primero. El "mago" replicó: entonces podemos acudir al Banco de Dios. Le dije, eso es para los oyentes de la radio. No, arguyó. ¡Nosotros somos pobres y vamos a pedirle ayuda al "Banco de Dios".

En efecto, en la radio había un buzón para las cartas, una especie de cajón de cierta altura y que estaba ubicado en la puerta de entrada. En momentos que todos los demás salían a almorzar, el "mago" con mi complicidad, ponía de cabeza el "buzón", revisaba algunos sobres y si los encontraba algo llenitos, los separaba. Volvía a sellar el artefacto y, "si ligaba", participábamos a medias del óbolo. Gracias a "este regalo de Dios", disfrutábamos de un rico "cau cau", picantito y sus panes calientes en una caserita de "Coco" en el mercado de la Aurora. Ocurrencias de mi gran amigo Jorge Salas y este su cómplice. Aclaro que no volvimos a repetir esa experiencia más de una vez. "Es que éramos pobres". Remembranzas que me han permitido evocar a dos grandes amigos de "las perillas" tan bromistas como yo. ¡Que Dios nos perdone! Gracias.

jueves, 29 de septiembre de 2011

BIANCA CASAGRANDE. LA PRODUCTORA QUE ME DIO OPORTUNIDAD DE ANIMAR "CINCOMANÍA" EN PANAMERICANA TV.

Bianca
Casagrande
Siempre es bueno recordar y volver a soñar. Cuando empecé en la radio se me abría un mundo infinito de oportunidades. Los radioteatros me hacían alternar con los admirados actores de aquellos tiempos. Como locutor tuve dos amigos "buena gente": en las mañanas, Alberto Arenas, locutor y actor al que acompañaba a pasear con sus hijos. Por las noches, José Lázaro Tello a quien  le debo todo lo que se de criollismo. Muchas jaranas pasé a su lado y a cuantos compositores y cantantes conocí en lindas noches de bohemia.

Repasando el programa.
Fue en Radio Victoria, emisora en la que debuté y luego de 5 años de labor la dejé para buscar nuevos rumbos. Una gran escuela. Seguiría una etapa muy variada y llena de nuevas experiencias. En 1970 ingresé a Canal 4 y cuando surgió "Telecentro", época de Velasco Alvarado, pasamos a ser parte de esta empresa. No fue bueno el comienzo hasta que se nos dio oportunidad de hacer locución. El Coronel Jorge Ferreyros Seguín, mi gran amigo, nos dio a escoger entre "24 Horas" y "Cincomanía". Opté por el segundo que me dejaba libre en las noches y especialmente los fines de semana. Claro que el noticiero te hubiera proporcionado una mayor popularidad.

Estamos yo, Patty, Mario Moreno, "la morena",
Humberto M M., Cané Pardo, Roxana "la Ru-
bia", Ernesto García Calderón y Ana Thomas.
Ya era músico y las noches las necesitaba para trabajar con mi grupo musical. "Cincomanía", un programa de concurso con juegos divertidos y en un principio como "El Diccionario Parlante", me dio ocasión de suplir al conductor Humberto Martínez Morosini. Allí quedó para siempre en mis recuerdos, la productora peruana  Bianca Casagrande. Evoco que, ante una imprevista ausencia de Humberto, me preguntó: ¿te atreves a animar? Muy suelto le dije que sí. Me sabía todo el itinerario del programa y debuté en la televisión.

Relajada y sonriente les
envía cordiales saludos.
No puedo olvidar los intentos de Nacho Cané Pardo, que llegó 15 minutos después del inicio del programa, para hacerse cargo de la animación. Ya estaba metido en él y había agarrado confianza y el público ni notaba la ausencia del titular. Aún recuerdo que Ignacio me decía: "en cuanto no puedas, me avisas". Creo que eso me dio más ánimos y confianza. En una pausa conversé con Bianca y me dijo que continuara, siempre muy seria y responsable de su cargo. Me olvidé de Nacho y terminé el programa entre aplausos del público.

¡Espérenme! Ya voy por
casa. Un abrazo a todos.
En otra oportunidad y debía grabarse el programa, sucedió otra vez la ausencia de Martínez Morosini. Bianca Casagrande, la Directora y Productora de "Cincomanía" me dijo que animara. Así de sencillo. Esa confianza de esta dama en mi persona no la puedo olvidar jamás. Vería el programa al día siguiente y entre mi familia y amigos pudimos apreciar nuestra actuación y salimos aprobados. Algo importante. El primer reemplazo fue visto por Alfredo Marcilio y Mauricio Arbulú, gerentes del 5 y el 4, y tuvieron la gentileza de felicitarme y muy sorprendidos.

¡Besos para todos y en
especial para José Carlos!
Lástima que "Cincomanía" acabó pronto y algo más: allí también actué como "El Hombre del Acordeón" y presentado por Humberto Martínez Morosini, quien me clavó ese sobrenombre. Pero es y lo digo de todo corazón, a BIANCA CASAGRANDE a quien siempre reconoceré su confianza y aliento. Una productora que dio mucho de ella en diversos canales y con quien tuvimos un reencuentro a través del Facebook. Un abrazo para tí Bianca querida. Estos recuerdos gratos te los debo y se renuevan a cada instante gracias a verte por Facebook. Estaremos atentos a cuando decidas visitarnos. ¡Saludos! Gracias.

viernes, 26 de agosto de 2011

VEINTICINCO AÑOS EN AMÉRICA TELEVISIÓN. TODA UNA VIDA Y MUCHOS RECUERDOS. CARLOS SERVÁN.

Buenos recuerdos con Pablo
de Madalengoitia.
Habíamos llegado al Canal 4, reemplazando a Antonio Llerana Marotti en los programas de Kiko Ledgard. Fue a finales de 1969 y Antonio debía viajar para "México 70". Rápidamente fuimos acogidos por Kiko y recuerdo a Humberto Polar que coordinaba el programa como parte del equipo productor y que dirigía Alberto Sánchez Aiscorbe, el actual alcalde de la Victoria. Me agradaba Miguelito Mejía, coordinador del Canal que me puso en autos de nuestras intervenciones y me trataba de "campeón". Un saludo para tan popular personaje de aquellos años.

Al poco tiempo y ya cerca a Marzo del 70, Luis Ángel Pinasco nos recomendó a Roberto Cruzado, Gerente General y me puso en manos del Jefe de Personal Augusto Cáceres que, pese a lo recomendado, cumplió con su evaluación de rigor y finalmente me aprobó. Ingresaba a las planillas un 3 de Marzo de ese año y me convertiría en el titular de Promociones, la voz de los principales programas, los de Pablo de Madalengoitia y Kiko Ledgatd. Cubría el turno de 5 a 9 de la noche de lunes a sábado y reemplazando a Osmán Hernández 

Una reunión con Luis Ángel
Pinasco y Roberto Salinas.
Encontré un ambiente de camaradería y rápidamente me confundí entre aquellos nuevos colegas. A las 9 de la noche, me sacaba Víctor Dongo Casalino, la puntualidad en dos piernas. Lo diré sin mal ánimo, los sábados me reemplazaba Jaime Pizarro Arquíñigo de Huaral, todo lo contrario de Dongo. Eso no fue óbice para al poco tiempo, convertirnos en grandes amigos. Además de locutor, era cantante y gracias a él, animé con mi conjunto muchas celebraciones de su entorno, con gran beneplácito de ambos. Buen cantor de tangos.

Hubo una interrupción durante el Gobierno Militar de Velasco Alvarado y se nos envió a "Telecentro". Había pecado de sindicalizarme y pese a la mala experiencia que tuve en Victoria Televisión, reincidí aceptando el cargo de Secretario de Defensa. Un pequeño incidente con mi amigo Jorge Ferreyros Seguín, Comandante que representaba al Gobierno, hizo más rápido este trámite. Se nos quiso cambiar de profesión y fui el único que no lo aceptó. Sin embargo, logré resarcirme y ayudar a mis hermanos locutores. Es otra historia.

Aquí con mis amigos César
Nieri  y Mauricio Arbulú,
ambos fallecidos.
Durante "Telecentro", seguimos de locutores de los programas de Pablo y Kiko. Alternamos con Amanda Barral, Diana García de Palacios, Ada Vigo y una coleguita de Arequipa apellidada Romaní. También fuimos locutor de "Cincomanía" y "El Diccionario Parlante" con Humberto Martínez Morosini. Recuerdo feliz es el de haber animado este programa, ya en sus postrimerías gracias a Bianca Casagrande. Poco tiempo después, el Gobierno Militar devolvería los canales a sus correspondientes dueños. Volvimos a América TV.

Nos esperaba nuestro trabajo de promociones y all`, Nel Dyer, la Jefa de turno, nos nombró redactor oficial. Invité y logré que Jaime Pizarro, locutor volante y de Radio América, se integrara al equipo. También llegaron Manny Rey, Liliana Burga y Diana García. En aquella nueva etapa y siempre en la misma cabina con Dongo y Pizarro, ante injustas actitudes hacia nosotros, terminó nuestro ciclo a los 25 años, un 3 de Marzo de 1995. Renunciamos y luego de finalizar "Musiencuentros" en Radio Nacional del Perú, nos jubilamos. Seguiremos con estas "Remembranzas". Gracias.

jueves, 4 de agosto de 2011

JARANA EN CASA DE JOSÉ MENDOZA, PADRE DE ANA MENDOZA, MI INOLVIDABLE AMIGA EN RADIO VICTORIA. 1957.

Ana Mendoza Corzo
Fue un fin de semana, cuando todavía no existía el "sábado chico", y se trataba de celebrar el cumpleaños de Don José Mendoza en el Callao, cuna y sitio de sus mejores hazañas. Fue padre de Anita Mendoza Corzo, gran actriz peruana y que me contaba en sus radioteatros como narrador. Ya dominábamos el acordeón y Ana deseaba le hiciéramos oír "Rosa Elvira" y otros valses inmortales. El tono era en la noche de aquel fin de semana, viernes con hora de entrada y sin tarjetas para salir. ¡De rompe y raje!

Clemente Hidalgo, técnico de la radio y Ana Maria Álvarez, querida magistral locutora, estaban invitados, Nos transportarían en su flamante automóvil y convinimos en vernos a las 7 de la noche en la radio como punto de partida. Ese carro llevaba una carga de lujo. Las dos guapas compañeras de trabajo, 90% del lujo y el joven locutor que hoy reseña sus recuerdos más el conductor, el querido y recordado "cholo" Clemente. Fue cuestión de 30 minutos lo que duró salvar el recorrido hasta la chalaca provincia constitucional.

Luis Abanto Morales y su
locutor de aquellos tiempos
Gran llegada y las acogedoras puertas de la casa de Don José, se abrieron para recibirnos. El saludo, los abrazos y a acomodarse para empezar. Un brindis y justo suena el timbre anunciando la llegada de Luis Abanto Morales y su guitarrista Alberto Luque. Un delicioso vino "quita calzón" servía para decir ¡salud! Calor hogareño y sabor criollo en tono de fa, servían de escenario para que la fiesta empezara. Un timbre más y llegaban José Dávalos y el animador de las multitudes José Lázaro Tello.

La familia radial estaba presente y Don José Mendoza no cabía en su pellejo de puro contento. Sazonados por el vino, nos arrancamos con "Rosa Elvira" en un solo de acordeón. Fue una sorpresa para los artistas el vernos dominar nuestro instrumentos. Aplausos y más "salutis" y pidió la palabra José Dávalos. Tono más la guitarra de Luque y la propia de José, dieron marco, a pedido del dueño del santo, para cantar "Al pie del Misti", su gran éxito del disco. Cantó lo mejor de su repertorio y nos dimos el primer lujo de acompañarle.

José Dávalos y
nuestra Jesús Vásquez
Turno para Luis Abanto Morales y allí nos adaptamos al estilo del "cholo". A pedido de Anita, cantó la polca de Morales San Martín "Jálame la Pitita! y que todo el mundo cantó el estribillo famoso. Otros temas más y un remate con "El Rancho de la Cambicha", su gran éxito y alegría total. Esto sucedió hace 54 años atrás y Abanto, José Dávalos, el "cholo Clemente" y quien escribe estas reseñas, estamos todavía en esta tierra del Señor. Una remembranza que me da gusto compartir con ustedes mis amigos.

Vimos salir el Sol en el horizonte marino del Callao, dejamos a Don José Mendoza más feliz que ninguno y cada cual retornó como llegó. Olvidaba decir que José Lázaro Tello, condujo la presentación de los artistas muy a su estilo y con esa chispa criolla y aquel "guapeo" sabroso para cada tema. No hubo necesidad del toca discos y todo aquello quedó grabado en nuestra memoria para siempre, tal como subsisten Ana María Álvarez, Anita Mendoza, Don José, Alberto Luque y quienes viajaron al más allá. Gracias.

sábado, 4 de junio de 2011

VÍCTOR RAÚL HAYA DE LA TORRE. FUI SU LOCUTOR EL DÍA DE LA FRATERNIDAD EN LA CASA DEL PUEBLO. ANÉCDOTA.

Ante micrófono de ayer
Evocamos el año 1955 y José Eduardo Cavero Andrade, el dueño de radio Victoria, se había comprometido a transmitir la famosa y tradicional celebración del "Día de la Fraternidad". Éramos todavía un novato locutor que había ganado el concurso de "Nuevas Voces" de su emisora y en Octubre del año anterior, cumplimos con la grata tarea de transmitir desde diversos lugares, la procesión del Señor de los Milagros. Un 22 de Febrero nos comprometió a esta tarea de informar sobre el famoso acontecimiento aprista. Recuerdo que le pregunté a Don José Eduardo sobre las pautas a seguir. Me respondió que en la Casa del Pueblo me iban a poner en autos. 

Con Clemente Hidalgo, técnico de la emisora y gran amigo que recuerdo mucho, porque estuvo casado con esa gran locutora peruana Ana María Álvarez y con la que tuvo una hermosa bebé, hoy posiblemente una profesional, partimos con el debido tiempo a instalar el transmisor portátil y los correspondientes micrófonos. Íbamos, en cierto modo, a una aventura. Por razones de familia y en especial malos recuerdos del Comisario G. C. Don Ángel Serván CH., mi padre, cuando prestó servicios en Trujillo, escenario de una masacre a la policía y de la que escapó milagrosamente, no teníamos simpatía al partido de Alan García. Con los años cambiarían esos conceptos de mi parte, pero la familia... ¡ni hablar!

Fue todo un líder aprista.
Nos dirigíamos a cumplir una labor profesional, es decir, a una función netamente de trabajo. Sólo teníamos 20 años de edad y aquello de ir a apreciar en vivo y en directo a Víctor Raúl, nos parecía irreal. Siempre escuchábamos su voz a través de la radio. El primer impacto que recibimos fue el recibimiento de tres colegas y glorias de la locución peruana: Pedro Tello Cadenas, Manuel Ñique Cornelio y Fidel Ramírez Lazo. Los tres, apristas hasta los tuétanos. Mucho mayores que yo y me extrañaba que, siendo grandes locutores, no aparecieran en el escenario. Me recibieron con mucho afecto y me llenaron de datos para leer durante la transmisión de la gran fiesta. 

Foto característica de Haya
Hoy, sonrío por lo iluso como me comporté. Sufrí una transformación que casi me convierte en "compañero". Recuerdo al inicial disertante, el famoso "cachorro" Manuél Seoane y que fue el primer lider al que presenté. Continuaría con Ramiro Prialé, Luis Alberto Sánchez y otros que, ante tanto entusiasmo y confusión, no recuerdo sus nombres. El aliento de Tello, Ñique y Ramírez Lazo, era constante. ¡Cómo quedar mal con ellos! Hasta que tocó el turno al jefe máximo. Quedé sorprendido por las atenciones que le brindaban los "compañeros". ¡Jefe! por aquí. ¡Jefe! por allá. Calculo que Víctor Raúl, estaba en toda la plenitud de sus facultades.

Masa humana en A. Ugarte.
Olvidaba decir que observar la inmensa cantidad de pañuelos blancos en Alfonso Ugarte y los ¡Víctor Raúl!, ¡Víctor Raúl!, ¡Víctor Raúl!,  me asombraron. Estaba de la noche a la mañana en la más grande manifestación aprista. Todo aquello lo narraba con entusiasmo y al presentar al "jefe", lo hice como si fuera un "compañero" más. En otras palabras ¡vivía el partido! Cada pausa del Jefe, le acercaban su vaso de agua y una bandeja con una toalla para que se refrescara el rostro. Víctor Raúl, jadeaba constantemente cuando recibía los vivas y aplausos de aquella multitud aprista. Fue una experiencia inolvidable estar a su lado.

Cuando volvimos a la radio, nos esperaba José Eduardo Cavero y nos felicitó por ser "aprista". Lo dijo en tono burlón y complacido por la transmisión. Lo peor venía después. Llegué a mi domicilio en mi querido Surquillo y un poco más "me matan". El antiaprismo se manifestaba en toda su expresión. Me dijeron de todo y en los tonos más álgidos. De castigo, no me habían guardado nada para cenar. Por más que quise explicar que lo había hecho cumpliendo un trabajo, no me aceptaron las disculpas. Esto disminuyó el festejo interior que llevaba conmigo, de haber cumplido con éxito mi tarea. ¡Gran iluso José Carlos! Gracias.

sábado, 28 de mayo de 2011

DOÑA MARÍA INFANTAS. ¡UNA CUSQUEÑA INOLVIDABLE! SU RECUERDO: "DOÑA PETRONA"


Hay personajes que no han tenido relación alguna con nosotros en el campo radial y televisivo. Son muchos e inolvidables. Al que evoco ahora, siempre está presente en mi hogar porque tuvo el acierto de obsequiarnos un libro de recetas y que nos ha servido de guía en los inicios de nuestro matrimonio. "DOÑA PETRONA", el que conservamos con mucho cariño. En efecto, tiene relación con ella, la inolvidable Sra. María Infantas. Tuvo mucho que ver en nuestro noviazgo y en todo lo que ha transcurrido desde que la conocimos.

Cómo olvidar su tiendita en el Paseo de la República, entre la Av. 28 de Julio y el Estadio Nacional. Allí, a ese pequeño establecimiento que nos abrigaba con su calor humano, llegábamos Gaby y yo. Los enamorados de la radio Victoria. Desde el año 56 y perdimos la cuenta. La señora María, muy bondadosa con todos, nos tenía reservado el asiento interior. Generalmente atendía al paso. ¿Que ofrecía? Un café pasado y unos panes con chicharrón y relleno. Siempre el camote, dulce como la dueña y la "canchita".

Jamás estaba vacío. A toda hora y ayudada muchas veces por su hermano Benjamín y el bueno de José, su hijo. Muchos estaban de pié y no se si era casualidad pero, gran mayoría de sus clientes eran parejitas de enamorados que visitaban el entonces "verdadero" Parque de la Exposición. Cuando había fútbol, Doña María no se daba a basto para atender a tanta gente. Muy conversadora y atenta con todos. Hicimos una gran amistad con ella y su familia. ¡Cómo olvidar esta etapa de novios!

Es que Gaby cantaba en la radio Victoria y quien reseña era locutor de la misma. Nos enamoramos y la tiendita de Doña María era muy acogedora. Como se dice, éramos "caseritos". Estuvo invitada a nuestro matrimonio y nos obsequió el famoso libro de "Doña Petrona". Recuerdo imborrable. Muy aficionados con su hermano a las tardes de toros, nos invitaron en una oportunidad a la Plaza de Acho. Toreaba "El Nene" y había un buen cartel de novilleros. Disfrutamos de aquella tarde con toda su tradición limeña.

Doña Petrona
Solía visitarla a su nuevo establecimiento, un verdadero restaurante, cuando hacíamos el programa "Musiencuentros" en Radio Nacional del Perú. Siempre la encontrábamos atareada y con sus hijos José y el menor que se me ha ido su nombre. Su ubicación, algo más cercana al Estadio. Allí nos enteramos de la muerte de Benjamín, su hermano. Le hicimos una visita con nuestros hijos, para que conocieran a la Sra. María, la dama cusqueña que nos supo infundir amor y amistad. Quedaron impresionados con ella y con su sazón, porque almorzamos en su restaurante.

 El tiempo se ha llenado de años, peinamos canas y los buenos recuerdos siempre se asoman. Hace mucho tiempo que perdimos contacto con Doña María. No sabemos si el negocio continúa y qué será de ella. De lo que si estamos seguros es que permanece en nuestros corazones como si fuera ayer. Una remembranza a Doña María Infantas, inolvidable personaje de nuestra vida. Donde esté, que Dios la siga protegiendo. Quizá José o el otro hermano, lean esta reseña y sepan que no los olvidamos. Gracias.

sábado, 16 de abril de 2011

MI AMIGO CARLOS MANSILLA EN "RADIO CENTRAL". AÑO 1968. ¡QUÉ RECUERDOS!

Dr. Carlos Mansilla Gardella
Va la evocación a un gran amigo que hicimos en nuestra cotidiana labor de locutor por 1968 en Radio Central, de la calle Belén. Me refiero a Carlos Mansilla Gardella, campechano, con algunos años menos del que escribe y que nos visitaba con Eduardo "Lalo" Regalado, bombero con  habilidades de mago, muy excéntrico y dueño de hacer malabares. "Lalo" tomaba una silla y elevándola del suelo a la altura de sus hombros, colocaba una de sus patas en su mandíbula inferior. Empezaba el equilibrio y era todo un espectáculo cuando la hacía girar suavemente. Ambos pertenecían a la Cía. de Bomberos "Roma", la del Congreso.

Cía. de Bomberos "Roma".
Las horas nocturnas son muchas veces tediosas en la labor del locutor. Esas noches de Central, cuando el frío del invierno calaba los huesos, estos generosos bomberos nos transmitían sus energías y calor de amistad, que nos olvidábamos de todo. Carlos, el más alegre y vivaracho de los dos, cursaba estudios de Derecho, si no me equivoco, en San Marcos. Era tremendo y siempre con el chiste a flor de labios. Le agradaba la locución y al margen de sus estudios, quería ponerse frente al micrófono. Hizo sus pinitos con nosotros y nos demostró que tenía buenas condiciones.

Gran Magistrado.
Recuerdo que habíamos creado el "Club de Leonardo Favio", muy popular por esos años y nos venían con sus pedidos de "Fuiste mía un verano", !Quiro aprender de memoria", "Ella ya me olvidó", "O quizá simplemente le regales una rosa" y otros títulos que se nos han ido de la memoria. Ambos solteros y muy solidarios. ¡Cómo olvidarlos! Dejamos radio Central y cada vez que veíamos a un ilusionista, llegaba como por arte de magia la figura de Eduardo Regalado Vercelli, el popular "Lalo". Su magia con los "pasadores", haciendo desaparecer nudos o extrayendo bolitas y hasta hojas de afeitar de las orejas, nos dejaban mudos ¡Un señor mago!

El tiempo pasó vertiginoso y por los años 70 u 80 del siglo pasado, Carlos Mansilla probaba micrófonos en Radio América y nosotros ya laborábamos en Canal 4 de televisión. Su colega Ramiro Arriarán, destacado hombre de leyes y también locutor, lo había invitado al mundo de la radio y Carlitos, ni corto ni perezoso, aceptaba el reto. En uno de los pasillos nos reencontramos y recordamos brevemente aquellos sus años felices de bomberos con Regalado y que nos visitaban en radio "Central" la Emisora más Popular.

Consejo Nacional de la Magistratura
Quién se iba a imaginar que aquel alegre y arriesgado miembro de la Compañía de Bomberos "Roma", frente al Congreso, cumpliría 45 años de servicio y ha sido condecorado como "Bombero Emérito del Perú" y por "Servicios Distinguidos". No podía ser de otra manera y bastó aquel corto tiempo en Radio "Central" para conocerlo a fondo. Como Fiscal en lo Penal, ha ejercido el cargo durante 20 años y ha integrado nada menos que  el Consejo Nacional de la Magistratura. Toda una personalidad.

Un señor Fiscal y gran Amigo
 Fue una sorpresa que nos hallara por medio de mis blogs. Un escrito suyo nos hizo emocionar y una buena tarde nos vimos en un "huarique" gastronómico de su inventario. En menos de dos horas, nos confundimos en los recuerdos de antaño. Él es el Dr. Carlos Mansilla Gardella. Hombre probo y decente. Con una familia honorable y una esposa a la que dedica todo su amor y cariño. Hijos que siguen su línea y amigo de ayer, hoy y siempre que conserva su sencillez de manera admirable. Para él, con toda mi emoción y respeto, este mi  modesto homenaje en "Remembranzas". Gracias.

viernes, 4 de marzo de 2011

"4 de Marzo 2011". TRES AÑOS DESPUÉS DE MI OPERACIÓN AL COLON.


¡Gracias Hospital Sabogal!

Debí haber escrito esta nota ayer. La alegría de llevar a mis nietos al "colegio" (un nido), nos distrajo todo el día y el retorno a nuestro hogar, nos halló extenuados pero felices. Es que un 3 de Marzo de 2008, ingresamos por emergencia al Hospital Sabogal del Callao. Desde Enero de aquel año, gracias a mis queridos hijos y esposa, habíamos cumplido, de manera particular, las indicaciones del Dr. Claudio Zegarra Ames, amigo y vecino, y del Dr. Martín Mondragón, que nos ayudó en todas las gestiones para mi internamiento.

No puedo olvidar, luego de revisar todas las ecografías, tomografías y pruebas de laboratorio, la manera cómo nos sentenció Martín. "Tienes un tumor en el colon y hay que extirparlo ¡yá!". Soy un viejo asegurado que cotiza desde la década de 1950. Enfrentábamos por primera vez esta experiencia. Nuestra respuesta, tratándose de la salud, fue que sí. El 3 de Marzo, a las 8 a.m., luego de angustiosas gestiones y siempre ayudado por el Dr. Mondragón, ya éramos pacientes y teníamos operación de emergencia al día siguiente.

"El Redentor"
Había que estabilizar nuestra hemoglobina y gracias a los familiares y amigos donantes fue superada. Enemas y otras atenciones durante la noche, completaban el cuadro. Hora de la operación, las 11 de la mañana del 4 de Marzo 2008. Imagínense. Angustias de la familia y las propias del enfermo. Alientos y esperanzas. Rezos y ofrecimientos. Antes de enrumbar hacia el quirófano, los rostros de mi novia eterna y de mis hijos. Me hice el valiente y los besé. Luego, a cruzar los pasillos y a esperar la voluntad del Señor. Fue un "largo" viaje.

Ya en el lugar, previas mis invocaciones a todos mis muertos, los preparativos. Asistentes y rostros cubiertos. Algo así como para que no los identifique. Todas damas. Muy alegres, las chicas indagaban el por qué de mi palidez. No sabían de mi anemia. Les contesté, a modo de contentarlas: "Y... ¡el miedo!". Todas rieron. Una voz, la del Dr. Martín Colca Cahuana, indagaba a toda voz por la Tomografía. La tenía mi esposa. Llamada por parlantes y llegó. Se acrecentó la angustia y no recuerdo cuándo me dormí. Desperté y aquí estoy.

Mis nietos y "novia"
Lo cierto es que hoy celebro TRES AÑOS DE SUPERVIVENCIA. Han contribuído a mi restablecimiento la Dra, Patricia Pimentel Álvarez, destacada oncóloga del "Sabogal", a quien considero mi amiga y verdadera profesional que alienta a sus pacientes. A mi hogar. Una gran esposa y mejores hijos. A mi familia y amigos. Las oraciones de todos y que no merezco. A las Almas de mis muertos y a DIOS TODOPODEROSO. A Jesús y su Madre Santísima.  A los buenos empleados del Hospital Sabogal del Callao y a ESSALUD.

Finalmente, tengo el aliento de escribir en este medio cibernético. Gran terapia e importante para olvidarme de mi mal, sin descuidarlo y que surgió gracias al obsequio de su computadora por parte de Zoila Gabriela, mi hija. Otro motivo que me anima a vivir, son mis nietos, los mellizos Alejandra y Joaquín y "regalo" de Mercedes Castro y Juán Carlos Serván Bernales, mis otros hijos. Ir a verlos durante la semana y estar a su lado, me reconforta en grande. Acompáñenme y brindemos por este TERCER AÑO. ¡SALUD! Gracias.

miércoles, 23 de febrero de 2011

EL "¡MALDITA SEA!" DE JOSÉ EDUARDO CAVERO ANDRADE. ANECDÓTICO.

¡Maldita sea, oiga!
De esa Radio Victoria de antaño, muy famosa como "la emisora de los mejores programas", guardamos una serie de anécdotas de sus diversos personajes. El principal fue José Eduardo Cavero Andrade. Propietario y Gerente de la misma que proyectó sus miras hacia la televisión, cuando todavía ni lo pensaban el 4, el 5 y el 7. Don José Eduardo, solía exclamar frecuentemente, al llamar la atención a sus empleados, la frase ¡Maldita Sea! Justo fue lo primero que oí de sus labios, en la primera entrevista que nos concedió. La comento en "Mi primera entrevista con J. E. Cavero en R. Victoria" en este blog.

Por esos años laboraba como conserje y encargado de algunos mandados, el recordado "Félix". Hoy es un progresista comerciante. Recuerdo que Cavero lo envió con unos documentos urgentes con las indicaciones del caso y el muchachito, hizo todo lo contrario. Nos encontrábamos en la sala de grabaciones y daba las explicaciones, con su típico "mote" de provinciano. No se hizo esperar el "maldita sea", con su voz de un tono especial y agregó seguidamente: ¡Cuándo aprenderás! ¿Has desayunado?. Toma 20 centavos y compra tu jugo de alfalfa, que mucha falta te hace. ¡maldita sea!. (La alfalfa era alimento de los burros).

Serván, Soto, Tello y Carlos A. Delgado
En otra ocasión y por efecto de la gripe y una buena amanecida, José Lázaro Tello llegó mal del "güargüero". En plena faena de los comerciales, cuando menos lo podía presentir, le falló la voz y emitió un sonoro gallo. Un falsete que nada tenía que ver con su estupenda voz. Se sintieron pasos ligeros de llegada a la cabina de locución y era Cavero portando un vaso de agua tibia. "¡Maldita sea, oiga! le dijo a Tello. Limpie su cañería. Esto le va hacer mucho bien". Era un preparado para hacer gárgaras y nos causó admiración su modo de actuar tan familiar con el gran animador. Nos pidió reemplazáramos al afectado, mientras realizaba aquella operación sanitaria.

Ya que comentábamos de José Lázaro esta anécdota, una vez, conociendo las reacciones del Sr. Cavero, le gastamos una broma pesada al "Animador de las Multitudes". Imitando la voz del Gerente, lo llamamos por teléfono desde otro lugar y pisó la tablita. "Sor Tello, -nunca decía señor-, acérquese a mi oficina que tengo algo importante que decirle". Con el operador Samuel Soto Marius, observábamos desde el control y a paso ligero a nuestro querido colega. Tocó la puerta de Gerencia y dijo "Sr. Cavero a sus órdenes." La respuesta fue inmediata: "¡Maldita sea, oiga! ¡Vaya a su hueco y no me interrumpa!" La verdad es que lo lamentamos.

Gálvez, Ramírez, Cavero, Ana Mendoza y Arenas
La frase aquella era su compañera. Pasados tantos años e infinidad de sucesos, puedo recién comprender la personalidad de este "brodcaster" peruano. La radio trabajaba a su ritmo. Amanecía en la emisora preparando el radioperiódico desde las 5. Escribía los editoriales y seleccionaba las noticias importantes del día. Todavía no hacía su aparición Juán Ramírez Lazo. El conductor era el gran locutor Alberto Arenas Coronel, con la colaboración del joven  José Carlos Serván. Terminado el informativo, iba a desayunar y retornaba a las 8 de la mañana a continuar con la brega. Prácticamente un Gerente con cama adentro.

Para completar esta remembranza les narraré lo que, a modo de asustarlo, le advertí al pequeño Eduardito, su engreído hijo de 7 o 9 años. No sabíamos de sus juegos y cómo se la ingeniaba para mortificar a quienes laborábamos en Radio Victoria. Este surquillano que todavía no cumplía los 20 años, le dijo que "si se me prendía, el que iba a pagar "pato" era su papá". Al minuto, Don José Eduardo y su "¡Maldita sea!" preguntó: ¿Es cierto que me va a pegar? Le di la explicación del caso y agregó: "Ud. recién ha dejado el cascarón y ya se comporta como un viejo. ¡Maldita sea! Mi hijo es sólo un palomilla!". Allí quedó todo. ¡Un fuera de serie!. Gracias.